En unas horas, se estrena en todos los cines del país “TÁR“, la nueva película que marca el regreso del director Todd Field (Little Children de 2006 e In The Bedroom de 2001) que también se encarga de escribir esta obra maestra de fines del 2022 que llega a nuestros ojos en inicios de este 2023 más que prometedor. Contando con varias nominaciones a los premios Oscar, el film está protagonizado por la magnífica Cate Blanchett (The Lord Of The Rings, Carol, Nightmare Alley, Thor: Ragnarok, The Aviator y un largo etcétera), junto a nombres más que interesantes como Nina Hoss (Phoenix, Barbara, Most Wanted Man, The Contractor y más), Noémie Merlant (Portrait Of A Lady On Fire, Jumbo, Paris 13th District, Curiosa), el debut de Sophie Kauer, Allan Corduner (Gladiator, Mr. Nobody, Disobedience, Defiance), Julian Glover (Troy, Harry Potter & The Chamber Of Secrets, Star Wars: Empire Strikes Back, For Your Eyes Only) y Mark Strong (1917, Cruella, The Imitation Game, Shazam!, Kick-Ass, Kingsman, entre otras).
La historia se centra en la vida de LydiaTár, una directora de orquesta de gran renombre envuelta en su conquista mundial sobre la música clásica al mando de la Orquesta Mayor de Alemania. Su auge y caída…
Todd Field no tiene pelos en la lengua ni temor alguno en arrancar su flamante película con una escena, que luego se desenmascara en la trama, para luego presentar el nombre de la misma en una tipografía minúscula y arremeter con los créditos. Si, los créditos en su totalidad antes de realmente comenzar.
Desde el vamos se plantea una sutil crudeza hacia el mundo de una persona famosa perseguida por la culpa y el silencio ensordecedor de sus acciones y manipulaciones que lentamente van develando sus obvias consecuencias. Desmantelando, construyendo y destruyendo el concepto de la cultura de la cancelación a medida que van pasando sucesos que por momentos dejan lugar al debate para terminar en una clara dirección hacia lo ya dicho: las acciones tienen consecuencias.
Cate Blanchett encarna un rol inmenso, de muchísimo cuidado en el desarrollo protagónico, dando una de sus mejores entregas, bajo la piel de Lydia Tár, una difícil entidad humana que en su clara inteligencia esconde snobismo y autoboicot (o quizás impunidad, o incluso viceversa) y que si bien se debe admitir que tiene buitres a su alrededor, también tiene un amor desmedido que la rodea pero que no cuida en lo absoluto.
Su ego no tiene delirios de grandeza porque esa grandeza habita en ella, pero su inclinación hacia la megalomanía va sepultando paso a paso sus hechos y dichos, a veces de forma merecida y otras no tanto, ya que la película también se dirige a los opuestos pero sin olvidar los grises.
Tár es una película difícil de afrontar, con un guión magnánimo al frente, la cinta cuenta con más de 3 idiomas surcando varios continentes, se centra en lo minimalista de su complejidad al abarcar un tema delicado que tiene tanto soportes como detractores.
La fotografía es excelente por donde se la mire con un recorrido por el globo y sus arquitecturas además de planos que utilizan un poco el surrealismo en pos de desenvolverse en el karma que acecha a la protagonista.
El tercer acto finaliza de una manera que realmente va a dejar atónita a la audiencia.
Se notará que intento no develar mucho sobre la trama, creo que lo más importante es sacar sus propias conclusiones y simplemente rendirse ante semejante obra maestra.
CONCLUSIÓN
Tár se presenta como una gran candidata a ganar Mejor Película en los Oscar, en una de las ediciones, en mi opinión al menos, más peleadas y de mayor nivel en mucho tiempo.
PUNTAJE: 97/100